miércoles, 17 de junio de 2009

Ajedrez


Estamos en una constante partida de ajedrez. Estamos sobre un tapete cuadriculado en el que vamos intercambiando movimientos con el resto de participantes. En el extenso tapiz negro y blanco. Y dentro de cada movimiento... una nueva cuadrícula.... minimalista.... movimientos hacia la locura o hacia la salvación o hacia el extásis de la meta lograda. O el fracaso. El peón se come a la reina, el caballo se come a la reina, la torre se come a la reina, todos nos comemos a la reina.... o eso es lo que decía Mel Brooks en aquella 'Loca historia del mundo'.

5 comentarios:

Juan Duque Oliva dijo...

Jaque y mate

Un abrazo Antonio

Gaviota libre dijo...

Asi es muchas veces... la vida puede ser un constante juego... Y a mi me encanta el ajedrez.

Antonio dijo...

Luz.... pero siempre nos queda el enroque como escapatoria...

Gaviota libre, bienvenida a este encuentro semanal. Y desde luego, las similitudes hacen pensar que estamos en una partida interminable.

saludos
Antonio

Unknown dijo...

Es ley de vida, Antonio. Lo importante es que los movimientos sean los adecuados. Los daños colaterales, ¡qué se la va a hacer...!

Saludos.

Antonio dijo...

D.G. claro, siempre hay que jugar. Así es. Saludos. Estoy deseando poder charlar un rato más tranquilamente contigo...

Antonio